En el Blog Le Salón Beige la Asociación francesa contra la eutanasia Aliviar pero no matar (Soulanger mais pas tuer) publica un sentido comunicado con motivo del reciente fallecimiento de Philippe Pozzo di Borgo, padrino desde 2014 de la citada asociación. Después de expresar su unión al dolor de su familia le rinde homenaje por su profundidad, sensibilidad y humor que ha impresionado a tanta gente.
El homenajeado se trata de una persona que sufrió un accidente en parapente que le dejó tetrapléjico en 1993 que, según la Asociación, le transformó de hiperactivo a hiperpresente, llegando tras una dura lucha a acoger su propia vulnerabilidad después de haber estado cerca de la desesperación, experiencia que relató en su libro El segundo aliento, llevado a pantalla en el tremendo éxito popular Intocables . También le gustaba decir que “Los intocables es el triunfo de lo que todos compartimos: la vulnerabilidad”. Su total militancia de lucha a favor de la cultura de la vida contra la eutanasia y el suicidio asistido se plasma en sus reiteradas manifestaciones:
“ Ciertamente, antes de mi accidente, habría firmado todas las peticiones a favor de legalizar el suicidio asistido o la eutanasia. ¡Qué “progreso”! Ahora que estoy del otro lado, en la fragilidad y el malestar, la eutanasia y el suicidio asistido no constituyen un progreso… Al contrario, ¡qué desprecio por el ser humano! ”
Con motivo de la consideración en la Asamblea Nacional de un proyecto de ley sobre eutanasia, declaró:.
“¿ No ven la presión, por no decir la opresión, que aumenta cuando una sociedad hace elegibles para la muerte a los más humillados, a los que más sufren, a los más aislados, a los más desfigurados, a los menos resistentes a la piedad de los demás y a los —algunos ya lo afirman— más costosos”.
Convencido de que “la eutanasia refleja una comunidad que se desmorona y se resigna”, ha alertado constantemente contra la violencia de esta reivindicación para las personas vulnerables.
Con motivo de la apertura de los trabajos de la Convención Ciudadana sobre el final de la vida el pasado 14 de diciembre, dirigió un nuevo llamamiento “Juntos por los más vulnerables” a los integrantes de la Convención y al Presidente de la República:
Todos necesitamos una mirada que nos considere y nos haga vivir, no reflexiones sobre un supuesto “derecho a elegir la propia muerte”. Ya sea que estemos bien o enfermos, todos estamos 100% vivos. (…) Con la fuerza de nuestra fragilidad, te pedimos por el bien de nuestra sociedad: No empujes a nadie a la desesperación, la autoexclusión, el suicidio o la eutanasia.
Protégenos de una supuesta libertad de morir que incitaría a algunos a dejarnos.
Reafirmar el derecho de todos a ser ayudados a vivir y nunca a morir.
Entonces la sociedad que estamos construyendo juntos será más humana”.
Desde España, los que estamos en contra de la eutanasia y el suicidio asistido, nos condolemos por la muerte de esta gran persona y con la asociación Aliviar pero no matar a la que animamos a proseguir su lucha que es también la nuestra: la dignificación debida a toda persona desde su concepción hasta su muerte natural.
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