Rasines
Bien de Interés Cultural: B.O.C. 11-01-1985
ESTILO ARTÍSTICO: Tardo-gótico/Renacimiento
El edificio más significativo de Rasines es, sin duda, la monumental iglesia de San Andrés. El templo, de sencilla estructura, se alza en la cuna del linaje de los grandes arquitectos Gil de Hontañón y es uno de los más notables del municipio y también uno de los más importantes de la región, aunque actualmente su estado sea de casi ruina como consecuencia del desplome de la torre.
ÉPOCA:
Finales del siglo XVI, inicios del XVII.
HISTÓRIA:
La existencia de este templo está documentada ya desde el siglo XV y estuvo vinculada a los Saravia, que más tarde compartieron patronato con los Fernández de Velasco. El edificio actual, levantado sobre otro anterior derribado en 1590, fue construido a finales del siglo XVI, posiblemente a partir del mandato testamentario del gran arquitecto renacentista Rodrigo Gil de Hontañón, que funda una capellanía. La torre se concluyó en 1680, el pórtico en 1756 y el pavimento en 1785. En 1980 se hundió el campanario y el edificio se clausuró.
CARACTERÍSTICAS:
Iglesia de grandes proporciones, con una gran volumetría. Posee planta de cruz latina, con torre en el hastial.
DESCRIPCIÓN:
Es una gran obra de sillarejo, casi siempre en arenisca, con sillares de caliza en los esquinales, contrafuertes y cercos de los vanos. Las trazas iniciales, elaboradas por Rodrigo de Rasines y Pedro de la Torre Bueras, que consistían en una planta de salón con tres naves de la misma altura, de tipo columnario, como las trasmeranas de Ajo e Isla, o Liendo; fue simplificado a una sola nave por falta de presupuesto.
Existe un pórtico de arcadas de la fachada sur, de aspecto sencillo y que cobija la austera portada principal del templo, con cuatro arcos rebajados sostenidos por pilastras, diseñado por Andrés Antonio Bolde.
De esta forma, se trata de un templo de planta es en forma de cruz latina de una nave con cabecera o ábside rectangular, transepto y dos tramos, que se remataba en el hastial con una esbelta torre. Las bóvedas son de crucería con terceletes, de tradición gótica (la bóveda de combados del crucero revela la influencia de Juan de Rasines).
Al interior se destaca la grandiosidad del retablo mayor, de estilo barroco churrigueresco, de orden salomónico, tres calles y más de diez metros de altura, contratado en 1698 y concluido en 1714, con diseño y condiciones del escultor Jerónimo de Angulo (que trabajó junto al ensamblador Domingo del Rivero) y el pintor Felipe Pico Edilla. El retablo lateral del evangelio tiene la misma autoría. El de la epístola es una copia moderna de éste del siglo XIX de estilo neoclásico. Detrás del retablo mayor -que presenta también un grave problema de conservación por la existencia de termitas-, existe pintura mural que representa a la Virgen realizada con anterioridad a la contratación del retablo. Existen en el templo otros dos retablos más del siglo XVIII.
Desde hace años la iglesia ha permanecido en un estado lamentable a consecuencia del desplome de la torre, por un problema irreversible de cimentación, que en su día no pudo ser atajado a pesar de las grandes grietas que se advertían. En su caída arrastró también al último tramo de la nave y se perdió el interesante órgano romántico del siglo XIX que se alojaba en su interior. En la actualidad está siendo restaurada.
PROPIEDAD Y VISITAS:
Obispado de Santander. Es la iglesia parroquial del lugar, pero en la actualidad carece de culto. No posee régimen de visitas, al estar actualmente en proceso de restauración. Desde el exterior se llegan a contemplar los retablos y el aspecto interior del templo.
BIBLIOGRAFÍA:
CAMPUZANO, E.; ZAMANILLO, F.: Cantabria Artística. I. Arte religioso. Santander 1980.
VV.AA.: Guía del Arte en Cantabria. Santander 1988, p. 465.
LOCALIZACIÓN Y ACCESOS
Situada a unos 65 km. al sureste de la capital. En la N-634 es preciso tomar la desviación hacia Ampuero y Ramales al llegar a Colindres. Después de unos 12 km. aproximadamente se llega a Rasines, pudiéndose encontrar el templo a la entrada de la localidad.